El día de los muertos, Halloween, Todos los Santos, Samhain y otras festividades conmemoran, coincidiendo con el fin del verano, el día de los difuntos. Las más antiguas tradiciones apuntan que ese día los muertos vuelven a la vida, y el velo que nos separa del mundo de los muertos se estrecha dejando pasar a los espíritus, buenos o malos, al mundo de los vivos. El 31 de octubre se ha convertido en el día del terror por excelencia, y una buena partida de rol de esta temática es ya casi una tradición entre los jugadores de rol. Hoy queremos compartir contigo Los Alzados, una aventura exclusiva para Fragmentos. Y además dar a conocer nuestros horrores favoritos, explorar los miedos de algunos de los componentes del equipo de Nosolorol y contarte cuáles son nuestros subgéneros preferidos cuando nos enfrentamos al terror en la mesa de juego.
Elena Alonso, Marketing: «¿Han dejado ya de llorar los corderos, Clarice? Un sonido, un olor, una mirada fija en una puerta entreabierta... el terror psicológico en los juegos de rol hace aflorar tus instintos más primitivos de supervivencia convirtiendo al miedo en la única oportunidad que tienes de sobrevivir. Todo lo que esconde la realidad detrás de la máscara de la falsa tranquilidad se ve multiplicado por las posibilidades que te permite una mesa de juego. Solo debes tener en cuenta una gran premisa si quieres seguir viva: nunca hagas lo que esperan».
Luis Fernández, Corrección: «El terror es un género que siempre me ha entusiasmado, aunque no tengo un estilo favorito para pasar miedo. Me gustan las historias que impliquen antiguas leyendas o culturas ya extintas cuyos ecos resuenen en la actualidad. No busco elementos fantásticos o sobrenaturales (aunque me enamora cuando se hilvanan con la trama), pero sí disfruto muchísimo cuando el horror se va cociendo a fuego lento y despliega sus raíces lentamente sobre mí. También me encanta la sensación de impotencia ante lo inevitable, sobre todo en los finales».
Arancha Blázquez, Diseño y maquetación: «Posesiones, elementos sobrenaturales, historias antiguas que mezclan magia, rituales, superstición y ese miedo tan humano que se le tiene a lo desconocido, a lo que no se ve. Cosas que no podemos controlar. Sin duda es el género que más me atrae, aunque al mismo tiempo, pertenece a ese tipo de películas que no vería sola o antes de dormir, o a ese tipo de literatura que sé perfectamente que provocará que mi imaginación se descontrole en cuanto la oscuridad haga acto de presencia».
José Lomo, Contenidos: «Aunque disfruto con casi todos los subgéneros del terror, siempre he asociado la noche de difuntos con esos atávicos relatos de venganza de ultratumba. Creo que es un momento propicio para perseguir espectros y otros espantos, sean góticos o postmodernos, occidentales o asiáticos. Mi voto para las historias de fantasmas, las casas encantadas y los exorcismos. Los viejos clásicos nunca mueren… porque ya están muertos».
Ana Navalón, Traducción y corrección: «Yo me quedo con el terror clásico de las novelas góticas. Ese miedo que se te mete por debajo de la piel, como la gélida brisa de una silenciosa noche de octubre. Ese frío que, por mucho que te tapes, no se va. El crujido de una puerta, la sombra tras la ventana, el aullido del viento, el golpeteo de la lluvia contra el cristal… Ese miedo a lo desconocido, pues, a veces, lo que nuestra propia mente es capaz de imaginar es mucho más terrorífico que lo que acecha en las sombras...
Nacho Muñiz, Ventas y marketing: Nunca he sido un gran fan del terror, pocas veces siento miedo y eso le quita gracia al género. Sufro y me angustio —que es lo divertido aquí— con situaciones cotidianas o diálogos incómodos, donde el terror psicológico campa a sus anchas. ¿Qué está pasando? ¿Qué hace este tipo en mi casa? la sensación de indefensión, la cercanía y ese pensamiento de «me podía estar pasando a mí» son lo que espero de una partida de rol de terror».
Verónica Madrigal, Atención al cliente y administración: «Me encanta el terror. Me gusta en películas, en videojuegos y, por supuesto, en juegos de rol. No entiendo muy bien por qué será, ya que puedo llegar a pasar la mitad de la película tapándome los ojos mientras me arrepiento de estar viendo eso… En cualquier caso, donde más disfruto/sufro este género es en los juegos de rol. Si el director de juego me conoce bien, sabrá dónde están mis límites, así que puede llegar a ser realmente divertido «pasarlo mal». Dentro de los juegos de rol, me gusta el terror basado en situaciones paranormales, monstruos y similar; donde el origen del peligro parece ser una criatura no humana. Concretamente, hace poco jugué a Fantasmas Asesinos y desde el primer momento ya estaba completamente sumergida en la historia y fue increíble. Otra ambientación que adoro es la basada en los Mitos de Lovecraft. Lástima que el director de juego nunca me deje llevar mi Conociendo a Cthulhu cuando jugamos..».
Enrique Esturillo, Logística: «Mis favoritas son las Casas Encantadas. Aúnan el terror y la investigación, con unas reglas de género particulares, que permite variaciones estéticas desde las casonas góticas donde dar rienda suelta a los adjetivos más lovecraftianos y los fantasmas clásicos, pasando por los apartamentos clónicos del terror japonés, encantados por espíritus postmodernos o los barcos fantasma con sus pasajeros atrapados entre mundos, e incluso las naves espaciales habitadas por IAs asesinas. Todas las Casas Encantadas son un puzzle que hay que resolver para sobrevivir, una aventura que sólo se puede ganar descubriendo la verdadera historia que se oculta entre sus paredes».
Edén Claudio, Corrección: «En un medio narrado como es una partida de rol, me gusta un terror que dé tiempo a asimilar, que aparezca sutil pero que vaya entrando en ti a fuerza de insistencia hasta tenerte tan invadida que no puedes escapar a él. Por eso mi género de terror favorito es el de aislamiento: el monstruo acecha (ajeno o propio…) y tú, que no tienes adonde huir, te quedas a solas con el miedo rondándote la cabeza. ¿Qué me va a pasar? ¿Qué puedo hacer? ¿Será mejor esperar o actuar? La sola idea de estar atrapada, ya sea en un complejo subterráneo, en un barco a la deriva o en la inmensidad del espacio, me aterra».
Sergio M. Vergara, Director de Producción: «Siempre he sido de géneros psicológicos, de vivir cuándo llegará ese momento de máxima intensidad más que la escena de terror en sí. El terror asiático mezcla esa tensión con leyendas de una manera tan natural que me hace sentir que sigo dentro de la escena más allá de su final. Estas historias son capaces de hacer de lo sobrenatural algo cotidiano, haciéndote creer que todo es posible. Y como colofón, las historias de este corte siempre tienen un giro final que te hacen pasar de la seguridad del "final feliz" a la inquietud de que nada ha terminado».
Esther Sanz, Diseño y maquetación: «Terror psicológico sin duda. Una partida repleta de escenas que no sepas si estás dentro de una pesadilla, de una realidad horripilante o si tu personaje sufre algún estado mental alterado. Si además lo aderezamos con espíritus, rituales y personajes inquietantes, con fuertes dosis de misterio e intriga, todo ello con un desarrollo degenerativo y autodestructivo, para mí sería la receta perfecta. No hay nada más terrorífico que aquello que nuestra mente no logra comprender».
Manuel J. Sueiro, Director General: «Me resulta difícil elegir un único género de terror porque cada uno me aporta cosas diferentes y lo disfruto de un modo distinto. Aunque todavía no he probado en mesa este género en materia audiovisual me estoy aficionando mucho al found foutage. Esa pretensión de realidad, frescura y a menudo falta de medios terminan dejando todo a merced de la historia y aunque por desgracia es un género que ha engendrado mucha mediocridad, alberga también auténticas joyas que no siempre reciben el reconocimiento que merecen. Es una buena noche para aventurarse».
Pilar M. Espinosa, Directora de Ventas: «¡Trampas! ¿Trampas? Un género frenético contrarreloj que pone a prueba a los participantes. La sensación de incertidumbre, soledad y cooperación con el resto de participantes (o no) son los elementos clave que harán pasar miedo en la mesa de juego; en definitiva, un género de terror donde en numerosas ocasiones el monstruo eres tú».
¿Y tú? ¿cuál es la horrible pesadilla que esperas encontrar en tus partidas de terror? Coge tu manual de Fragmentos, revisa los diferentes tipos de terror e ideas de aventura y aterroriza a tus jugadores en la noche de Halloween.
